O, cómo aprendí a dejar de preocuparme y amar el bombardeo de barrios residenciales.
Combinando segmentos de declaraciones y resoluciones en apoyo del «derecho a la autodefensa» de Israel con artículos antiimperialistas sobre Siria, he podido componer la guía definitiva para justificar los crímenes de guerra.
Dados los desastrosos antecedentes de EEUU en Oriente Medio —especialmente la invasión y ocupación de Iraq— y las múltiples mentiras provenientes de Washington para justificar sus políticas, comprensiblemente muchos estadounidenses se han vuelto escépticos respecto a las intervenciones de EEUU y las racionalizaciones utilizadas para defenderlas. Esto lleva a muchos estadounidenses a oponerse tanto a la intervención directa en Siria como a armar a las facciones rebeldes —y con razón.
Pero a pesar de que hay espacio para el debate en ciertos aspectos del conflicto, determinados elementos del movimiento antiguerra y de la izquierda antiimperialista —como el U.S. Peace Council, la ANSWER Coalition, algunos líderes del Green Party e incluso el ganador del Premio Nobel Mairead Maguire— van más allá de la oposición a la intervención de EEUU e implícitamente (y en algunos casos, explícitamente) defienden el corrupto y autocrático régimen de Bashar al-Assad. Minimizan o niegan su responsabilidad en los crímenes de guerra, intentan desacreditar a prestigiosas organizaciones de derechos humanos que documentan estos crímenes, igualan virtualmente a toda la oposición siria con sus componentes más extremos y violentos, y atacan a compañeros de la izquierda que no están de acuerdo con ellos.
Muchos de los argumentos usados para justificar los devastadores ataques del régimen sirio contra ciudades rebeldes son escalofriantemente similares a los que usan los políticos de EEUU, en sus declaraciones públicas y en una serie de resoluciones parlamentarias apoyadas por ambos partidos, para justificar los asaltos masivos de Israel contra la Franja de Gaza controlada por Hamás. Combinando segmentos de estas declaraciones y resoluciones que apoyan el «derecho a la autodefensa» de Israel con algunos artículos sobre Siria, he podido componer la guía definitiva para justificar crímenes de guerra.
Cómo aprendí a dejar de preocuparme y amar el bombardeo de barrios residenciales
El bombardeo de Alepo/Gaza es un acto legítimo de autodefensa por parte del gobierno de Siria/Israel contra los terroristas islamista apoyadas desde el extranjero. Los informes de grupos como Amnistía Internacional y Human Rights Watch (HRW) que acusan a Siria/Israel de violar la ley internacional humanitaria se basan en rumores extendidos por los partidarios de los terroristas y no deben ser tomados en serio. De hecho, tanto AI como HRW han demostrado repetidamente ser anti sirios/anti Israel, parte de su tendencia general pro-/anti–occidental. Médicos sin Fronteras y Médicos por los Derechos Humanos también han mostrado su sesgo anti-sirio/anti-Israel en sus informes de suspuestos «crímenes de guerra», ignorando que las escuelas y los hospitales bombardeados por las fuerzas sirias/israelíes han sido usadas por los terroristas para lanzar cohetes a zonas controladas por el gobierno/Israel y son por tanto objetivos legítimos.
Y muchas de esas supuestas «atrocidades» de las que se culpa al Ejército Árabe Sirio/Fuerzas de Defensa de Israel son en realidad falsificadas o cometidas por los terroristas. Las pérdidas de vidas civiles son trágicas, por supuesto, pero la responsabilidad recae únicamente en los rebeldes/Hamás. Assad/Netanyahu quiere la paz, pero tiene la responsabilidad de proteger a su pueblo del terrorismo.
Análogamente, como lo demuestra su informe culpando a Siria/Israel por la inmensa mayoría de las muertes de civiles, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU ha demostrado ser irremediablemente tendencioso, negando el derecho de Siria/Israel a la autodefensa. De hecho, las Naciones Unidas tienen una trayectoria de señalar injustamente al gobierno secular/Estado judío, y por lo tanto haciendo necesario el ejercicio del poder de veto de Rusia/EEUU para bloquear los esfuerzos internacionales de deslegitimar al gobierno sirio/a Israel.
Mientras tanto, los medios de información —incluyendo programas como Democracy Now! y redes como Al-Jazeera— han repetido simplemente la propaganda anti-siria/anti-Israel mediante su parcial forma de informar sobre el conflicto, aunque al menos redes como RT/Fox News han corregido la información errónea.
Aquellos que demonizan a Siria/Israel por defenderse de los grupos terroristas islamistas como Al-Nusra/Hamás en realidad no están preocupados por los derechos humanos o la legislación internacional. De hecho, los que se denuncian supuestos «crímenes de guerra» cometidos por Siria/Israel ignoran completamente los verdaderos crímenes de guerra cometidos por Israel/Siria. Estos supuestos activistas de «derechos humanos» están dando apoyo a la agenda de EEUU e Israel/Irán y Siria y están motivados por el imperialismo/anti-semitismo.
No existen grupos moderados anti-Assad/palestinos; son islamistas extremistas y terroristas. Y la afirmación de que ha existido un movimiento noviolento anti-Assad/palestino es simplemente un mito.
Los rebeldes sirios/Hamás no existirían si no fuera por el apoyo de EEUU e Israel/Irán y Siria, que los utilizan para poner en práctica sus planes de destruir Siria/Israel. Ésa es la razón por la que Rusia/EEUU deben seguir defendiendo al pueblo de Siria/Israel, rechazan los llamamientos a suspender la ayuda militar y trabajar con su aliado para eliminar la amenaza del terrorismo.
Stephen Zunes es profesor de Política y Estudios Internacionales en la Universidad de San Francisco. Otros artículos suyos en stephenzunes.org.
Publicado originalmente en In These Times