Encuentro de objetores e insumisos históricos del País Valenciano en Llíria
El fin de semana del 16 y 17 de septiembre más de 20 objetores, insumisos y personas que participaron directamente en este movimiento de desobediencia civil antimilitarista que se extendió a lo largo de casi tres décadas, se encontraron en el Centro La Salle de Llíria para celebrar la memoria de esta lucha y reafirmar la vigencia y necesidad del antimilitarismo y la acción noviolenta en el momento actual. Todas estas personas estuvieron vinculadas a grupos del MOC del País Valenciano y participaron en diferentes etapas de este ciclo de protesta: desde el propio Pepe Beunza, la primera persona que dio una dimensión política y pública a su negativa a ser reclutado, pasando por los objetores que siguieron inmediatamente el camino abierto por él, como Rafa Rodrigo o Jordi (hoy Arbre) Agulló, los que formaron los primeros grupos de objetores de conciencia en la segunda mitad de los años 70 y combinaron su desobediencia con el gesto pedagógico de organizar servicios civiles autogestionados en barrios como el Barrio del Cristo, Orriols o Nazaret, los objetores que apostaron por la campaña de “objeción colectiva” en los 80, y los insumisos que rechazaron la LOC y la Prestación Sustitutoria en los 90, hasta llegar a los “insumisos en los cuarteles” de finales de los 90, hasta el colapso definitivo del sistema de reclutamiento en 2000.
En la primera tarde del encuentro, de rememoración, se compartieron las experiencias individuales de participación en estas distintas etapas de la objeción y la insumisión, casi todas centradas alrededor del grupo del MOC de València, con la excepción de un insumiso de Alacant. Seguramente por primera vez hasta ese momento, los participantes tuvieron ante sus ojos un hilo conductor completo de la genealogía de la objeción e insumisión desde los primeros objetores, los insumisos, hasta los insumisos en los cuarteles. Se constató que la única discontinuidad en la evolución del grupo tuvo que ver con el abandono de la táctica de los servicios autogestionados a principios de los años 80 y de la idea de un proyecto de vida comunitaria, que inspiró al primer grupo de objetores de València.También se pudo apreciar cómo el grupo pasó de estar formado mayoritariamente por objetores que provenían del cristianismo de base en los años 70 y primeros 80, hasta la inspiración mayormente libertaria de los insumisos de los 80 y 90.
La segunda fase del encuentro se centró en los planteamientos personales y colectivos actuales, 15 años después de la salida de los últimos insumisos-desertores de la cárcel militar Alcalá de Henares. Las personas participantes compartieron sus visiones sobre la situación social y política, especialmente en lo tocante al fenómeno del militarismo, y el papel de grupos como el MOC en ello. Los actuales miembros del MOC-València (hoy antimilitaristes-moc), expusieron las líneas de trabajo actuales del grupo, en el campo de la promoción de las herramientas de la noviolencia, la objeción fiscal al gasto militar, el análisis antimilitarista de conflictos actuales y la solidaridad internacional con grupos civiles y noviolentos. El participante del grupo Tortuga de Elx-Alacant, también expuso su visión amplia sobre el militarismo actual.
Finalmente, ya el domingo 17, las personas participantes abordaron sus posibles convergencias, tanto para apoyar las líneas de trabajo actuales del movimiento antimilitarista actual, como para pensar en nuevas acciones que en las que aportar su enorme capital de memoria y experiencia.
En esta parte se habló de la defensa de las libertades civiles en Catalunya y el derecho de autodeterminación ante la amenaza explícita del gobierno español, la puesta en marcha de una campaña por la desmilitarización de la educación con participación de la comunidad educativa y otras organizaciones sociales, centrada en debatir qué hay que defender y cómo, y como primer objetivo en conseguir la no participación de las Fuerzas Armadas en la próxima edición de la feria infantil y juvenil Expojove. También se acordó estudiar la cesión a un archivo público del enorme fondo documental de la objeción y la insumisión que poseen los diferentes participantes y el que se almacena en el actual local del MOC-València. Otra de las conclusiones fue la necesidad de crear una “caja de resistencia” para hacer frente a la “burorrepresión” a las acciones noviolentas de desobediencia civil, como por ejemplo a las multas a las que se enfrentan después de la acción de bloqueo de los tanques destinados a las maniobras de la OTAN “Trident Juncture” en octubre de 2015 en el puerto de Sagunto.
En todo caso, objetores e insumisos históricos expresaron su disposición a apoyar la actividad actual del MOC-València en la medida que les fuera posible.
Las conclusiones del encuentro, se pueden resumir en los siguientes puntos:
– El MOC-València es una entidad que aunque no legalizada ha tenido una continuidad histórica a lo largo de 40 años como grupo de funcionamiento asambleario, independiente y autogestionado, de ideología antimilitarista y noviolenta que durante la etapa del reclutamiento forzoso en España constituyó un auténtico movimiento social. EL MOC tiene plena vigencia en la actualidad, sigue siendo instrumento indispensable para la acción noviolenta en el marco de una revolución integral de la persona y la sociedad.
– EL MOC se ha de proveer de una caja de resistencia para evitar su falta de continuidad en el tiempo, conscientes de que cualquier acción noviolenta tiene consecuencias económicas importantes que pueden frenar el proceso.
– La estructura del MOC ha de continuar siendo asamblearia, pues posibilita un tipo de acción no jerarquizada y al mismo tiempo eficaz.
– Conviene seguir profundizando en el debate iniciado en este encuentro sobre la realidad política y social actual para una mayor eficacia en la lucha por una sociedad desmilitarizada, más justa y más democrática. El MOC como movimiento social trabaja al lado de otras luchas sociales. No es una entidad creada para el análisis teórico de la realidad, sino para la acción noviolenta.
– Se decide crear un fondo documental con material escrito y gráfico para la historia de la objeción-insumisión en el País Valenciano.
– Periódicamente se convocarán encuentros lúdicos y convivenciales para estrechar los lazos de afecto entre miembros del MOC y ampliar la participación a amigos y familiares.
Más información:
– Memoria histórica del MOC-València
– En legítima desobediencia: tres décadas de objeción, insumisión y antimilitarismo